Muchos planes, ningún plan
Más de la mitad de los parados en España no reciben ningún
tipo de ayuda. En seis años de crisis, no solo se ha disparado la tasa de
desempleo sino que estamos en un estadio todavía peor: a demasiados ciudadanos
se les ha acabado la prestación o la ayuda familiar y se encuentran en la más
absoluta intemperie social.
Aunque los datos de empleo van mejorando algo, lo hace a un
ritmo tan lento que no hay manera de acabar con este drama. Vamos sumando
empleos precarios a cuentagotas. De una forma tan frágil, que no llega para
muchas personas que llevan años sin trabajo y sin recibir ayuda alguna.
Vamos a cerrar el año sin bajar de los cuatro millones y
medio de parados, un porcentaje altísimo de ellos son andaluces. Y son tantos
los anuncios de planes, que ya no sabemos qué plan tienen para acabar con esta
lacra. Cuando se preparan tantos planes es que no hay ninguno que ha dado
resultado.
Están todo el día anunciando medidas, pero nunca nadie
explica cuáles son los resultados de esas medidas. Y así llevamos décadas:
mucho dinero invertido en cursos, en formación y en ayudas. Y ni un solo dato
sobre los resultados obtenidos.
A partir de ahora, la primera medida que debería contener un
plan de empleo sería un compromiso de qué luego nos digan que empleo se creó,
de qué calidad y cuánto duró.
Lo digo, porque hace
un año, tras 365 días anunciando medidas, teníamos prácticamente la misma tasa
de paro que tenemos ahora. O dicho de otra forma, cuando hay muchos planes es que nadie tiene un plan.
Comentarios
Publicar un comentario